Cepillos de limpieza Citoplus 45060006

Limpieza de una bureta

Este proceso es necesario realizarse inmediatamente después de su uso. Consiste en lavar la bureta con jabón neutro, utilizando un cepillo con cerdas en los dos extremos, luego se debe enjuagar bien con abundante agua corriente y después con agua destilada.

Si la limpieza no fuera completa con el jabón, se puede lavar con una disolución de ácido comercial o potasa alcohólica. En el caso de las buretas, es suficiente, casi siempre, limpiar la bureta con agua del grifo y después con agua destilada. Si lo considera necesario se puede dejar en remojo con disolución caliente de jabón durante un rato y después proceder como se ha descrito arriba. El material de porcelana, aunque es resistente a los cambios bruscos de temperaturas conviene evitarlos pues pueden llegar a romperse. Para lavarlos puede seguirse el mismo método que para el vidrio.

Nota:

Cuando una bureta no está seca y se desea utilizar, se procede a curarlo, enjuagándolo tres veces con pequeñas porciones del mismo líquido o solución que se desea medir.

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